Mi vida sin mi

“Rezas para que esta sea tú vida sin ti.
Rezas para que las niñas quieran a esta mujer que se llama como tú y para que tu marido acabe por quererla.
Para que vivan en la casa de al lado y las niñas usen el remolque para jugar a las muñecas y apenas recuerden a su madre que dormía de día y las llevaba de viaje en canoa.
Rezas para que tengan momentos de felicidad tan intensos que cualquier pena parezca pequeña a su lado.
Rezas a no sabes qué ni a quién, pero rezas, y no sientes nostalgia por la vida que no tendrás, porque para entonces habrás muerto, y los muertos no sienten nada.
Ni siquiera nostalgia.


miércoles, 10 de noviembre de 2010

Odio y asco en Las Vegas


Hoy es un completo e irremediable odio el que siento hacia el mundo. Pocos se salvan de mis colmillos afilados y mis garras; todos menos uniformes verdes, blancos y azules, y gente con menos de dos dedos de frente; es decir, 4 o 5 se salvarán, y a más de la mitad ni les conozco.

Es una pena y da verdadero asco vivir en esta sociedad, y ya no culpo al país ni a la "cultura" (de nada sirve hacerlo), empezaré a culparme a mi misma, por haber nacido tan tozuda y con unos ideales inalcanzables por lo visto por todo bicho viviente.

Necesito huir de la mediocridad (de todo en consecuencia). ¿Me aceptarán en otro planeta?
¿Qué te llevarías a otro planeta?
1. Mis no-normas.
2. Mi tozudez.
3. Tú, si tú, que tienes más de dos dedos de frente oh! gracias!