
¡Qué razón tenía ese tal Murphy...! Si algo puede salir mal, saldrá peor... y más ahora!
Empieza el día a las 8 a.m. de forma catastrófica.
Continuos resultados pésimos en mi vida a pesar de mis esfuerzos; codos y lágrimas malgastados en vano.
Hace poco estaba como en una montaña rusa, ahora, creo que sigo montada en ella, pero en una de esas caídas en picado que tanto vértigo me dan. Sólo espero, que al igual que en la atracción, el precio por esa gran caída merezca la pena y me haga sonreir al final.
Hoy, gracias a que todo ha ido fatal, me siento con más fuerzas que nunca para conseguir lo que quiero, mi sueño.
Porque nadie dijo que fuera fácil, pero espero que lo que hoy parece el sacrificio de mi vida, acaba siento el mayor logro coseguido.