
Hoy, estudiando un tema sobre la inteligencia, se me ha ido durante un buen rato la cabeza, pensando en mi generación. La generación de la que nuestros mayores generalmente hablan mal, aunque no tanto como de la que viene ahora, que tiene tela.
Hace años, me corroía por dentro el escuchar ciertos desprecios y comentarios despectivos sobre mi "querida" generación, pero será que los años pasan por todos, y es el día de hoy en el que ese sentimiento ha pasado a convertirse en vergüenza y decepción. Y no, no soy ninguna carca ni nada por estilo. A mis 21 años me gusta lo que a todos: divertirme, estar con los míos, y sí, ¿por qué no decirlo? también me gusta tomarme mis cachis o copas los fines de semana con amigos, y echar algún que otro baile por ahí. También estudio, y no por ello me siento ninguna friki como parece que hay que sentirse (ya se sabe, no hay que trabajar ni estudiar, generación ni-ni que lo llaman...). Tampoco me van las peleas tontas fíjate, ni drogarme hasta las patas para ser mejor que nadie.
Sólo espero, y bastante es, que si algún día tengo hijos, sepa educarles como lo han hecho en mi casa y que no me los "reeduque" por ahí cualquiera, que miedo me da viendo lo visto.
Por todo ésto, estoy orgullosa de todos aquellos que hemos sobrevivido a las influencias de los Ni-ni :) .